A mi perro guía: gracias Astro por estar a nuestro lado.

Buenas de nuevo.

Estaba saliendo de la ducha y como siempre me he encontrado a mi Astro en la puerta moviendo el rabito, como si hiciera un siglo que no me ve.

Otras veces directamente lo tengo al lado de la bañera y una vez hasta se me metió dentro, pero a lo que iba.

Ver a mi Astro allí me ha echo recordar que va siendo hora que le escriba unas líneas por aquí, y como mañana hace años que fui a por él y pasado hacen años que me lo dieron, por qué no hoy?

Astrote, mi salvaje, llegó a mi vida y al pobre le iba a tocar difícil, o eso creíamos todos.

Yo tenía a una perrita guía jubilada,a mi Moma a quien nunca olvidaremos todos los que la conocimos.

Astro venía a suplirla y quien más y quien menos en casa se planteaba primero como se lo iba a tomar ella, y segundo, como íbamos a aceptar todos a ese nuevo perrito.

Yo recuerdo perfectamente que le dije a mi instructor unas mil veces que si él veía que yo iba a hacerle daño a Astro que no permitiera que me lo trajera a casa.

Como siempre, Juan Luna demostró lo pedazo instructor que es y acertó de pleno.

Un 15 de marzo por la tarde una cabecita muy grande apareció en mi vida abriendo su boquita y mordiéndome el brazo y desde hoy no se ha separado de mí.

Era un perrito muy bueno, noble, obediente, pero dominante como él sólo.Él lo arreglaba todo a carrera abierta, tanto si lo regañabas como si lo premiabas, y hasta  hubo que ponerle un holti para hacerse con él.

En fin que al principio en la escuela Astro era un castigo,pero un castigo precioso.

Cuando lo traje a casa ya estábamos adaptados los 2 y no hubo que ponerle el holti ningún día.

Siempre se portó como lo que es, como un perrito campeón, como el mejor golden con labrador que dios a puesto a hacer de perrito guía. Nunca he visto un perro tan seguro, para lo bueno y para lo malo. Lo mismo te hace pasar por medio de una obra sin cambiar el paso, o lo mismo decide que hay una pelota en la calle y que él la quiere y ahí voy yo también a por esa pelota como si nada.

En casa les robó el corazón a todos con su alegría y su simpatía. Digo les robó porque el mío ya lo tenía.

Con su hermana mayor Moma se llevó perfectamente desde el primer momento. No sé como entendió este salvajillo que Moma era un perrito mayor que cuando jugaba con ella nunca lo hacía haciendo el bestia como él nos tiene acostumbrados a todos.

Astro gracias por estar ahí, porque siempre tengo tu cabecita cerca para acariciarla, porque siempre estás dispuesto tanto a jugar como a trabajar, sea la hora que sea. Por demostrar tanta seguridad cuando llevas el arnés, por adaptarte tan rápido, por.... En fin, gracias Astro por haberte quedado con nosotros y por ser tan lindo.

Ahora eres el peluche preferido de mi sobrina Sofía y no me extraña porque algún día te vas a romper de bonito y bueno que eres.

Te queremos mucho Astro. Gracias por tantos y tantos buenos ratos que nos has dado y nos tienes que dar todavía.

Gracias a el instructor Juan luna por elegirlo para mí, y gracias a tu cuidadora Guadalupe por hacer de ti el perrote precioso que eres ahora.

Te quiero Astro, te quiero muchísimo salvaje.